La publicidad tiene la virtud de desvirtuarlo todo. Hace de lo pequeño una monstruosidad y banaliza los grandes valores.
A mí me sorprende la soltura con la que se utilizan palabras como democracia, derecho, injusticia...
Ahí tenemos a Telefónica que ha democratizado la Blackberry, a Orange que abandera una bonita causa con su lema “tienes derecho a internet”.
Además en los últimos tiempos Papito (Miguel Bosé) está protagonizando un interesante spot en el que te repite insistentemente que tienes derecho a ir a la moda, derecho a unas gafas nuevas, derercho a una nueva óptica. Lo que tienes son uno güevos, así con diéresis, que te los pisas.
También está una clínica dental que crea el concepto “todos tenemos derecho a una boca sana” o la mismísima Andie Macdowell que lo que sí que considera injusto son “estas arruguitas”. Indiscutible.
Tachadme de densa y de seria pero si enumero mentalmente algunas injusticias, las arruguitas de los morritos de Andie no ocupan los primeros puestos del “ranking” mundial. A mí me parece muy injusto que “la señora de la casa” del siguiente anuncio, tenga un cuarto de baño de 500 metros cuadrados y tenga que estar fregándolo personalmente, de rodillas…Qué injusticia, pudiendo tener una fámula sin papeles y con sueldo de risa, que le haga sus labores. El mundo está muy mal repartido.
Hay una lejía con ¡instinto maternal! y un niño que quiere comprar una hora de tiempo para su mamá. Enternecedor. Un viejito entrañable, le soluciona la papeleta. El pequeño se lleva una bolsa de arroz semipreparado y congelado. Su madre ganará una hora pero el niño pierde salud, seguro.
Un tema que me parece desproporcionado es el amor hacia los animales: es curiosa la entrega de los amos de perros y gatos hacia sus mascotas. A estas alturas los humanos estamos tan comprometidos con ellos que nos preocupa el envejecimiento celular de nuestros animales de compañía y así tenemos una marca de comida para canes que los protege del envejecimiento celular, de los antirradicales libres, vamos, para que se me entienda. Y cuando vas a comprar comida para gatos tienes la opción “gourmet” en salsa o al vapor. ¿En serio?. Pues sí. Ah, y que sepáis que vuestro perro también tiene que visitar una vez al año a su dentista, además de consumir las barritas “Pedigree-dentasticks”, que ayudan precisamente a proteger la dentadura.
Si tratáramos tan bien a nuestros congéneres como a nuestros animalitos de compañía, este sería un planeta más habitable. Por ahora lo que tenemos son perros muy sanos con un pelaje suave y brillante y dientes bien fuertes.
Pensemos que Brigitte Bardot, mujer de contradicciones, como casi todas, organizó una campaña de recogida de alimentos para los perros abandonados en Bosnia durante la guerra, mientras tanto, decenas de miles de personas morían víctimas del horror resultado del conflicto.
Alegría.
Seguimos:
Está también “El Calvo” de la lotería nacional con un claro mensaje: si tienes ilusiones o bien tienes dinero o ya te puedes ir olvidando. Para poder disfrutar de tu familia, compartir esos maravillosos momentos de publicidad con “los tuyos” (correr con una cometa entre campos de trigo, quedarte obnubilado observando el campanario nevado de una iglesia, girar sobre tu propio eje, brazos extendidos, vestida en tonos “beige” a orillas del mar; besar a una rubia prodigiosa en tu cama de 3 por 3 etc.), lo que te hace falta es “pasta”; ni más ni menos. ¡Estos son los valores que se promueven! Y la lotería nacional es eso: Nacional. Del Gobierno de España*.
*El Gobierno de España para los que no están muy leídos, es ese ente que te recomienda comer pescado congelado y tener TDT.
En la publicidad también se ensalza la amistad y enlazando esto, con la manía de que nuestro aparato excretor funcione correctamente, existe una marca de supositorios o de laxantes que en el anuncio presenta a una chica con sus amigas montando su casa. Sus amigas que le ayudan a no hacerse daño y que siempre están ahí. Es la amistad. Perdón: la Amistad.
La familia se reúne para comer en la masía de Tarradellas una pizza muy catalana, juegan juntos al tenis con la Nintendo Wii (¡y tienen agujetas!), ven apretaditos en el sofá alguno de los 95 canales del Trío de Telefónica y para todo lo demás: Master Card.
El poder del pueblo: hay un anuncio de cepillos de dientes que dice algo así como “millones de personas se levantan cada mañana y toman el poder” y acaba con un “power to the people” pronunciado en un perfecto inglés. Y es que la Era de Acuario ya ha empezado y eso, entre otras cosas, se percibe en que millones de personas lavan sus dientes con un cepillo eléctrico.
La ecología es un valor claramente en alza. “Todos tenemos derecho a un coche ecológico” gritan en un anuncio de Renault y los quesos de “El Ventero” se anuncian haciendo alusión a su faceta como productores de queso y de energías renovables, que encima les sobra y pueden dar cobertura a no sé cuántos hogares. Extraña pareja; el queso y las energías renovables. Bien por “El Ventero”.
En este punto me gusta mucho pensar en Repsol y en Endesa. Cuando uno ve los preciosistas anuncios de estas dos compañías (entre otras), se queda obnubilado y maravillado, tanto que pierde la razón e identifica a estas empresas como respetuosas con el medioambiente. Reflexionando un mínimo y sin ser una erudita del tema, me da la sensación de que penetrar los fondos marinos con máquinas infernales no debe ser muy bueno para nuestros mares…No me sorprende que las ballenas, los delfines o quien sea terminen varados en la playa, tienen que tener una jaqueca “de padre y muy señor mío”. Ustedes pueden darse un paseo por alguna central eléctrica o por alguna refinería y sacar sus propias conclusiones. Al cierre de esta edición, Repsol está aprovechando uno de sus anuncios, troceándolo y explicando que están trabajando para crear pavimentos ecológicos y combustibles a partir de un alga microscópica, no apta para el consumo humano. (No como los otros biocombustibles que se hacen con soja, con lo rica que está la soja y lo que alimenta…)
Y para terminar Vodafone con su campaña de “Es tu momento”, cierra sus anuncios con un “pum pum” del latir de un corazón, de tu corazón, del mío, del nuestro…
Lo importante es el “concepto” (como en Airbag):
Llegados a este nivel del desarrollo del mundo publiciatario, ya no compramos productos, pero no porque no queramos; es que resulta que ahora ya no se anuncian. Al potencial consumidor lo que se le vende son conceptos. Uno se compra un coche y compra seguridad, tecnología, diseño, ecología…Uno se compra un gel y compra hidratación y bienestar, si compras un yogur compras salud y regularidad, si compras una tele compras definición e innovación, si compras arroz precocinado compras tiempo…y así hasta el infinito. Hay productos de limpieza tan sofisticados que no sabes dónde aplicarlos, aunque estás tranquilo porque sabes que con ESE producto estás comprando desinfección, cuidados para tu casa y salud para los tuyos…y ya está ¿qué más queréis?.
Y aquí, para los inquietos la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Es una bonita declaración que data de 1948 y que nace en el seno (con perdón) de las Naciones Unidas. La cuestión es que como es de hace taaaaaaanto tiempo, a casi todos se nos ha olvidado el contenido (a unos más que a otros).
Artículo 1. Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
Artículo 2. Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.
Además, no se hará distinción alguna fundada en la condición política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o sometido a cualquier otra limitación de soberanía.
Artículo 4. Nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre, la esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas sus formas.
Artículo 6. Todo ser humano tiene derecho, en todas partes, al reconocimiento de su personalidad jurídica.
Artículo 10. Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra ella en materia penal.
Artículo 11. 1. Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa.
· 2. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueron delictivos según el Derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito.
Artículo 12. Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra tales injerencias o ataques.
Artículo 13. 1. Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado.
· 2. Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país.
Artículo 14 1. En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo, y a disfrutar de él, en cualquier país.
· 2. Este derecho no podrá ser invocado contra una acción judicial realmente originada por delitos comunes o por actos opuestos a los propósitos y principios de las Naciones Unidas.
Artículo 15. 1. Toda persona tiene derecho a una nacionalidad.
· 2. A nadie se privará arbitrariamente de su nacionalidad ni del derecho a cambiar de nacionalidad.
Artículo 16. 1. Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen derecho, sin restricción alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión, a casarse y fundar una familia, y disfrutarán de iguales derechos en cuanto al matrimonio, durante el matrimonio y en caso de disolución del matrimonio.
· 2. Sólo mediante libre y pleno consentimiento de los futuros esposos podrá contraerse el matrimonio.
· 3. La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado.
Artículo 17. 1. Toda persona tiene derecho a la propiedad, individual y colectivamente.
· 2. Nadie será privado arbitrariamente de su propiedad.
Artículo 18. Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia.
Artículo 19. Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.
Artículo 20. 1. Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas.
· 2. Nadie podrá ser obligado a pertenecer a una asociación.
Artículo 21 1. Toda persona tiene derecho a participar en el gobierno de su país, directamente o por medio de representantes libremente escogidos.
· 2. Toda persona tiene el derecho de accceso, en condiciones de igualdad, a las funciones públicas de su país.
· 3. La voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder público; esta voluntad se expresará mediante elecciones auténticas que habrán de celebrarse periódicamente, por sufragio universal e igual y por voto secreto u otro procedimiento equivalente que garantice la libertad del voto.
Artículo 22. oda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social, y a obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables a su dignidad y al libre desarrollo de su personalidad.
Artículo 23. 1.Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo.
· 2. Toda persona tiene derecho, sin discriminación alguna, a igual salario por trabajo igual.
· 3. Toda persona que trabaja tiene derecho a una remuneración equitativa y satisfactoria, que le asegure, así como a su familia, una existencia conforme a la dignidad humana y que será completada, en caso necesario, por cualesquiera otros medios de protección social.
· 4. Toda persona tiene derecho a fundar sindicatos y a sindicarse para la defensa de sus intereses.
Artículo 24. Toda persona tiene derecho al descanso, al disfrute del tiempo libre, a una limitación razonable de la duración del trabajo y a vacaciones periódicas pagadas.
Artículo 25. 1. Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad.
· 2. La maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia especiales. Todos los niños, nacidos de matrimonio o fuera de matrimonio, tienen derecho a igual protección social.
Artículo 26. 1. Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivos.
· 2. La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz.
· 3. Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.
Artículo 27. 1. Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten.
· 2. Toda persona tiene derecho a la protección de los intereses morales y materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas, literarias o artísticas de que sea autora.
Artículo 28. Toda persona tiene derecho a la protección de los intereses morales y materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas, literarias o artísticas de que sea autora.
Artículo 29. 1. Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede desarrollar libre y plenamente su personalidad.
· 2. En el ejercicio de sus derechos y en el disfrute de sus libertades, toda persona estará solamente sujeta a las limitaciones establecidas por la ley con el único fin de asegurar el reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades de los demás, y de satisfacer las justas exigencias de la moral, del orden público y del bienestar general en una sociedad democrática.
· 3. Estos derechos y libertades no podrán, en ningún caso, ser ejercidos en oposición a los propósitos y principios de las Naciones Unidas.
Artículo 30. Nada en esta Declaración podrá interpretarse en el sentido de que confiere derecho alguno al Estado, a un grupo o a una persona, para emprender y desarrollar actividades o realizar actos tendientes a la supresión de cualquiera de los derechos y libertades proclamados en esta Declaración.